- “La necesitamos donde está”, dijo al destacar el buen trabajo de la titular del CONACYT
- “Es honesta y tiene convicciones, por eso no va a la SEP”, dijo al defender su gestión frente al Consejo
- Adelantó que esta semana durante la conferencia mañanera dará a conocer el relevo de Delfina Gómez
Por Carlos Pozos (Lord Molécula)
Ciudad de México, martes 09 de agosto del 2022.- El Presidente de todos los mexicanos, Andrés Manuel López Obrador descartó que María Elena Álvarez-Buylla, Directora General del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, (CONACYT), vaya a ser nombrada nueva titular de la Secretaría de Educación Pública, ante la salida de Delfina Gómez -quien buscará la candidatura de MORENA al Gobierno del Estado de México-, y reiteró que será esta semana cuando dé a conocer el nombre de la mujer que será la nueva titular de la SEP..
“¿Álvarez-Bullya será la siguiente Secretaria de Educación Pública?”, le cuestionó el enviado de El Heraldo al Primer Mandatario en el desarrollo de la sesión de preguntas y respuestas de la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
-“No, no porque la necesitamos donde está, todavía no termina y ha hecho un trabajo extraordinario”., respondió el Jefe del Ejecutivo, y en seguida llamó a la titular del CONACYT, quién previamente había dado un informe de los resultados de su gestón al frente de la institución.
Resaltó que María Elena Álvarez-Buylla, es honesta, tiene dimensión social y piensa en el pueblo, por lo que no será la nueva titular de la SEP.
“¿Quién es María Elena, no lo sabe la gente porque ha sido muy maltratada, tiene tres cualidades, cuando menos: uno, esprofesional, fue premio Nacional de Ciencias y no en este gobierno, dos, es una mujer honesta, nada que ver con los que estaban ahí; tres, tiene convicción social, tiene convicciones, piensa en el pueblo, por eso no va a ir a Educación”, dijo mientras le daba un fuerte abrazo a su colaboradora.
El Jefe del Estado Mexicano recordó que las pasadas administraciones el CONACYT se usaba para dar el presupuesto a las grandes empresas para supuestamente promover la ciencia y la tecnología.
“El dinero del presupuesto para empresas como Monsanto y otras más; segundo, el dinero que manejaba el gobierno supuestamente para la innovación, esa palabrita que se puso de moda, pero con el pretexto de la innovación tecnológica en cada estado se construía un gran edificio, elefantes blancos, porque lo hacían para robar”.
