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TENDENCIAS DEL CRIMEN TRASNACIONAL: INTERPOL.   

Seguridad Nacional

Dr. Jorge A. Lumbreras Castro

Recientemente se conoció el documento titulado “Informe resumido sobre las tendencias de la delincuencia a escala mundial – Interpol 2022”; es un estudio que con base en información causal permite precisar las tendencias delictivas en las regiones del mundo. La Interpol señala que es la única organización policial internacional que con sus 195 países miembros, tiene la posición estratégica para evaluar las tendencias de la delincuencia transnacional a escala mundial y regional y señala que las expone en dos materias sustantivas: delincuencia y terrorismo, que por su alcance, volumen, frecuencia o su perjudicial repercusión, suponen una significativa amenaza para la seguridad, habría de decirse pública, interior y nacional.   

A continuación se describen de forma sumaria las tendencias en diferentes regiones del mundo, de acuerdo a la investigación de la Interpol, que resultan aleccionadoras para tener, por lo menos, un panorama sobre lo que acontece allende las fronteras, los desafíos a enfrentar en seguridad pública y reales o posibles antagonismos en seguridad interior y nacional.

En la región africana, el estudio señala el tráfico ilícito de cannabis y drogas sintéticas, medicamentos falsificados, bienes de consumo, armas ilícitas, así como trata de personas y tráfico de migrantes; señala la tenencia de delincuencia organizada, que probablemente esté impulsada por las vulnerabilidades derivas de conflictos, la inestabilidad y la corrupción, a lo que se añaden amplias oportunidades para la comisión de delitos, como son recursos naturales, minerales, madera y especies silvestres; también asevera que la amenaza del terrorismo se incrementó y que el Estado Islámico en África Occidental es la red terrorista responsable de la mayoría de los atentados. Por otra parte, ubica la tendencia de delitos financieros y corrupción, donde la estafa es la tendencia en la delincuencia financiera; la región al haberse posicionado rápidamente como líder mundial en la banca móvil, este sector es un objetivo vulnerable para la delincuencia financiera.

Finalmente, se refiere a la ciberdelincuencia, plantea que el rápido avance de la digitalización el sector financiero tuvo uno de efectos en el aumento de las estafas en la banca electrónica, la banca en general y las tarjetas de crédito. La extorsión digital, la estafa a empresas por e-mail mediante suplantación de identidad, el ransomware y los botnets también constituyen las principales tendencias de la ciberdelincuencia en la región.

En la región de las Américas y el Caribe el estudio ubica cinco grandes tendencias: 1.Tráfico ilícito. El tráfico de armas, la producción y distribución ilícitas de cocaína, la trata de personas y el tráfico de migrantes son los mercados delictivos generalizados. 2. La delincuencia organizada se sitúa en quinta posición entre las tendencias delictivas, es así que las redes delictivas y los grupos delictivos de tipo mafioso, constituyen un motor de la delincuencia organizada, en cuya facilitación los actores estatales y la corrupción desempeñan probablemente un papel central. 3. El terrorismo por motivos políticos, en particular el de extrema derecha se intensificó en los países occidentales y especialmente en América del Norte; mientras en 2010 se registró un atentado terrorista de extrema derecha, el número de atentados subió hasta 49 en 2019. 4. Delitos financieros y corrupción. El blanqueo de capitales es una tendencia de la delincuencia financiera y un facilitador de otros delitos. Las entidades financieras de la región probablemente han desempeñado un papel decisivo en el blanqueo de ganancias ilícitas que sirven para apoyar y fortalecer la delincuencia organizada. 5. Ciberdelincuencia. El ransomware fue la tendencia de la ciberdelincuencia más percibida en la región. La explotación y abuso sexual de menores en Internet se situó en tercera posición entre las 10 principales tendencias delictivas. Como se aprecia, estas tendencias en la región implican serias consecuencias para el orden interno y la seguridad nacional. 

En la región Asia-Pacífico, el estudio de Interpol localiza varias tendencias, en primer término, el tráfico de drogas sintéticas y heroína. Por otra parte, la trata de personas y el tráfico de migrantes son los mercados delictivos más generalizados; asimismo los delitos contra el medio ambiente, incluidos el tráfico de especies silvestres y productos pesqueros y los delitos forestales, son importantes actividades económicas ilícitas en algunas subregiones, sobre todo en el sur y el sudeste asiáticos.

En delincuencia organizada se señala que estos grupos parecen más generalizados y activos en el continente asiático que en Oceanía y que tienen un alcance mundial, en particular por su colaboración con redes delictivas en Próximo Oriente y África para traficar, entre otros artículos, drogas, mercancías ilícitas y productos derivados de las especies silvestres.

En materia de terrorismo, Asia Meridional es la subregión más afectada por el terrorismo en el mundo -el atentado más mortífero lo perpetró el Estado Islámico en Afganistán- en 2021. En la tendencia de delitos financieros y corrupción, señala las estafas, al blanqueo de capitales que se situó en tercera posición, entre todas las tendencias delictivas; asimismo, los delitos financieros y el fraude, facilitados por medios cibernéticos se intensificaron y seguirán haciéndolo. En ciberdelincuencia el estudio plantea que, entre las 10  principales tendencias delictivas percibidas están el ransomware, el phishing, las estafas por Internet, la intromisión cibernética y las estafas a empresas por e-mail por suplantación de identidad.

Finalmente, es preocupante, de acuerdo a la información de la que dispone por Interpol, la producción de material relacionado con la explotación y abuso sexual de menores en Internet, la cual está en auge debido a la demanda de este material fuera de la región.

Región Europea. El estudio señala varias tendencias, a saber: a) Tráfico ilícito. La producción y distribución ilícitas de drogas sintéticas y el tráfico de cannabis y cocaína son los delitos más percibidos por los países de Europa. La trata de personas y el tráfico de migrantes son una preocupación de primer orden en los países europeos. b) Delincuencia organizada. Se señala que la corrupción, el uso de empresas legítimas y la tecnología son facilitadores decisivos de la delincuencia organizada en la región europea. c) Terrorismo. El terrorismo yihadista, afiliado al Estado Islámico o a al-Qaeda, es la mayor amenaza para la región; señala que los terroristas que actúan en solitario y por iniciativa propia cometieron la mayoría de los atentados; d) Delitos financieros y corrupción. El blanqueo de capitales se situó en la segunda posición entre las tendencias delictivas percibidas; el fraude financiero se clasificó en un puesto elevado; e) Ciberdelincuencia. El phishing, las estafas por Internet y el ransomware son las principales tendencias delictivas percibidas. La explotación y abuso sexual de menores en Internet se situó entre las cinco tendencias delictivas percibidas como una amenaza en la región.

Como se observa en todas las regiones del mundo se registran una serie tendencias delictivas que suponen desafíos comunes para la mayoría de los países, son los casos de: tráfico ilícito, delincuencia organizada, delitos financieros, terrorismo, delitos financieros y corrupción y ciberdelincuencia, y en cada tendencia se agrupan a su vez series de delitos. 

El documento presenta conclusiones que merecen la atención de las instituciones en unos casos para realizar nuevos diagnósticos y en su caso fortalecer las capacidades disponibles para su investigación, persecución y sanción; en otros, para tomar medidas preventivas horizontales en una creciente vinculación gobierno sociedad; y en otros más, para desarrollar medios y capacidades que auxilien a las instituciones públicas mediante la denuncia, la información y la colaboración para enfrentar estos flagelos.

De las conclusiones del estudio de Interpol, se retoman algunas por su relevancia, a saber: a) a escala mundial o regional combatir eficazmente la delincuencia requerirá un compromiso por parte de todos los países miembros, las organizaciones policiales regionales y demás socios decisivos de los sectores público y privado, para trabajar en coaliciones contra la delincuencia transnacional; b) desmantelar los grupos delictivos organizados es fundamental para impedir los flujos de tráfico ilícito; c) son imperativos los esfuerzos colectivos entre las fuerzas el orden y los pertinentes agentes del sector público y el privado, para prevenir, detectar, investigar y poner freno a la ciber-delincuencia.

Finalmente, en la región de las Américas y el Caribe se localizan todas las tendencias delictivas, a saber: tráfico ilícito de armas, drogas, trata de personas y  tráfico de migrantes; delincuencia organizada, asociada a la corrupción; terrorismo que se intensificó en países occidentales y especialmente en América del Norte; delitos financieros y corrupción; y la ciber-delincuencia. Sobra decir, que estos delitos afectan a nuestro país lo que requiere avanzar en políticas para la prevención de delitos cibernéticos, trata de personas, tráfico ilegal de personas, adicciones y frenar el tráfico de armas de los E.U. hacia México. Asimismo, es fundamental fortalecer las capacidades de investigación, persecución y sanción de estos delitos. 

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