
- Ya se inició el proceso para profundizar en la investigación
LordMoléculaOficial
En una reciente declaración, el presidente López Obrador abordó el caso de Nuevo Laredo y afirmó que se están llevando a cabo investigaciones exhaustivas para identificar a los responsables y ponerlos a disposición de la justicia. El mandatario expresó su rechazo a las prácticas violentas del pasado y destacó la importancia de desterrar la violencia y el exceso de fuerza que se arraigaron durante el periodo neoliberal.
El presidente recordó que en el pasado las masacres eran ordenadas y que la seguridad estaba supuestamente vinculada a la política. Hizo mención al papel de García Luna, quien estaba a cargo de la seguridad del país y presuntamente promovía tácticas de “mátalos en caliente” y ajusticiamiento. López Obrador enfatizó que la situación actual es diferente y que su gobierno no permitirá casos aislados de violencia. Reafirmó su compromiso de erradicar la violencia y la impunidad que se instauraron en el pasado.
En relación al caso de Ayotzinapa, el presidente recordó que se inventó una llamada “verdad histórica” para proteger a elementos implicados, debido a la existencia de un “narcoestado”. López Obrador destacó que en su administración se actúa de manera diferente, poniendo énfasis en la búsqueda de la verdad y la justicia. Subrayó que su gobierno no tolera violaciones a los derechos humanos y que se investigarán todos los casos donde se presente una posible violación.
El presidente hizo hincapié en que su mandato no es resultado de la imposición de oligarcas, sino del mandato popular. Afirmó que el pueblo es sabio y los eligió para gobernar, lo que implica un compromiso con la justicia y el respeto a los derechos humanos.
López Obrador concluyó señalando que se tomarán acciones inmediatas en respuesta al presunto delito de ejecución extrajudicial en Nuevo Laredo, indicando que la Secretaría de la Defensa Nacional ha recomendado proceder legalmente. La fiscalía también realizará una investigación exhaustiva. El presidente reiteró su postura de no tolerar violaciones a los derechos humanos y destacó la importancia de un cambio de paradigma en la forma en que se aborda la seguridad y la justicia en México.