
Por José Sobrevilla
Difundimos anteriormente la entrevista del Dr. Edgardo Buscaglia donde narraba que grupos como el Cártel de Sinaloa, CDS, El Mayo Zambada y el Cártel Jalisco Nueva Generación, CJNG, tenían presencia en varios países y se les consideraba “Delincuencia Organizada Transnacional”; pues recientemente ‘InSight Crime’, una fundación que nació en Colombia y tiene presencia en Washington D. C. y Medellín, lanzó un estudio sobre los grupos criminales más pequeños, que son “hiperviolentos y localizados” y se han convertido en verdaderas amenazas para la seguridad nacional. Le cuento: esta fundación, InSight Crime, fue creada en abril de 2010 por el británico Jeremy McDermott, periodista de investigación que hoy enfrenta cargos por injuria y calumnia en Colombia, según ha denunciado el Comité para la Protección de los Periodistas, CPJ.
Otro de sus fundadores, Steven Dudley, es académico con experiencia en investigación y periodista con reportes para NPR (National Public Radio, de Estados Unidos), The Washington Post, The Economist y la BBC. Ambos crearon InSight Crime para estudiar el crimen organizado, como principal amenaza de la seguridad nacional y ciudadana en América Latina y el Caribe. Los fondos que reciben vienen de la Fundación “Ideas para la Paz”, FIP, de Bogotá, Colombia y la “Open Society Foundation” (que dirige György Schwartz, mejor conocido como George Soros); y además, desde agosto de 2010, son patrocinados también por el Centro de Estudios Latinoamericanos y Latinoamericanos de la Universidad Americana.
Ellos fueron los que descubrieron que muchos de los nuevos grupos criminales han sido escisiones de viejas estructuras de cárteles, pero otros, en algún momento, se dedicaron a ser –en alguna ocasión– ladrones de combustible, o transportistas de drogas que gradualmente subieron de nivel al grado que, sin embargo, pueden tener una enorme presencia por su panorama volátil, describe InSight.
“La Línea”
Con un alto grado de autonomía, este grupo fue el brazo armado del Cártel de Juárez que le ayudaba a defender sus territorios fronterizos en Juárez y alrededores de Chihuahua, cerca de El Paso, Texas; está integrado por agentes y ex policías que desde sus inicios cobraban impuestos a los cárteles de Juárez y Sinaloa por mover sus mercancías por el Valle de Juárez. Están involucrados en el microtráfico, tráfico de drogas sintéticas, tala ilegal y robo de automóviles en Chihuahua. También han establecido presencia en Ciudad Juárez, donde tienen acceso a rutas hacia la frontera entre Estados Unidos y México.
La Fiscalía General de la República, FGR, ha informado (febrero de 2021) acerca de una reunión entre miembros del CJNG y La Línea, presuntamente para discutir una alianza y combatir al CDS; sin embargo César Augusto Peniche, Fiscal de Chihuahua, negó posteriormente la evidencia de esa alianza. Su violencia se ha extendido hasta Sonora donde han enfrentado células del Cártel de Sinaloa como “Gente Nueva” en Chihuahua y “Salazar” en Sonora. Han sido considerados responsables de la masacre de noviembre de 2019 cuando fueron asesinados nueve integrantes de una familia mormona estadounidense. En julio de 2021 arrestaron al “H7”, su presunto líder, acusado de homicidio y participación en el crimen organizado. Tras ello, hombres armados atacaron la Comisaría del Municipio de Carichi Chihuahua.
Los Salazar
Son rivales de “La Línea”, y son una red criminal familiar con vínculos al Cártel de Sinaloa que se dedican principalmente a la producción y tráfico de marihuana, heroína y su transporte a Arizona. Se cree que comenzaron en Sonora a principios de 1990 con Adán Salazar Zamorano a la cabeza, quien es cercano a Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”; sin embargo, no fue hasta 2005 que la violencia perpetrada por ellos atrajo una atención significativa por parte de las autoridades.
Operan también en Sonora y Chihuahua, y han estado involucrados en enfrentamientos recientes con una célula del Cártel de Sinaloa conocida como “Los Rusos” (Baja California), quienes luchaban por el control del corredor Mexicali; rivalidad que sugiere que son células de la misma organización que –en general– pelean por el control territorial. Sus amenazas y violencia se han dirigido a otros grupos criminales, periodistas y funcionarios públicos.
Fueron presuntamente responsables en 2017 del asesinato de Miroslava Breach, y la desaparición en 2005 del periodista Alfredo Jiménez Mota. Aunque en agosto de 2019 su líder Sergio Alberto Del Villar Suárez, “El Napoleón”, fuera asesinado, el Ggrupo amenazó a la gobernadora de Sonora Claudia Pavlovich “por no cumplir sus promesas” argumentando que para el grupo “eso se paga con sangre”, le dijeron, aunque se desconocen los detalles de esta intimidación.
Cártel de Tijuana Nueva Generación
Son un grupo criminal con sede en Baja California que trafica heroína, cocaína, marihuana y drogas sintéticas a Estados Unidos a través del cruce fronterizo en Tijuana. Surgió de la alianza entre el CJNG y los remanentes del Cártel de Tijuana. El CTNG, es también conocido como Organización Arellano Félix, y se crearon para hacer retroceder al Cártel de Sinaloa. Aunque fue fundado como Cártel de Tijuana, se ha estado debilitando a medida que el CJNG se ha expandido. Hoy, al parecer pertenece al CJNG como ala local de aplicación de la ley, y son proveedores de logística de tráfico de drogas para las operaciones de ese cártel en Baja California. En 2016 InSight Crime había informado que el CTNG fue responsable de secuestrar, torturar y asesinar a sus rivales en la Península de Baja.
Su ubicación estratégica (Tijuana), junto a la frontera de California ha contribuido a una rotación significativa y al surgimiento de nuevas alianzas, o alas armadas y subgrupos de cárteles. La Ciudad también ha sido el hogar de uno de los grupos criminales más nuevos de México, “Los Cabos”, otro grupo armado dentro del CJNG que se ha escindido del CTNG, consigna InSight Crime.
Grupo Sombra
Son una escisión del Cártel del Golfo que se formó por 2017, y era conocido como Fuerzas Especiales Grupo Sombra (FEGS); ha sido el actor criminal más importante en la parte norte de Veracruz, pero también tiene presencia en Hidalgo y San Luis Potosí. Se dedica presuntamente al microtráfico, trata de personas, tráfico de migrantes, asesinatos a sueldo, secuestro, extorsión y robo de combustible.
Sus tácticas son extremadamente violentas, y a menudo difunden sus acciones a través de videos en redes sociales, o dejando los cuerpos de sus víctimas en vía pública. Sus principales rivales parecen ser los Zetas de la vieja escuela y el CJNG, este último que ha ganado terreno rápidamente en Veracruz. Informaciones de prensa han señalado que en 2019 formaron alianza con el Cártel de Santa Rosa de Lima para detener la expansión del CJNG en la parte central del país.
Han buscado y logrado el apoyo de la población local brindándoles ayuda social. Por ejemplo, el grupo fue uno de los diversos actores criminales que distribuyeron bienes durante los primeros meses de los encierros del Covid-19; organizaron celebraciones del Día del Niño y del Día de la Madre en municipios pobres de la región huasteca. En agosto de 2020, las fuerzas federales en Veracruz detuvieron al director de la Policía Municipal de Álamo de Temapache y a otros seis funcionarios por presunta confabulación con el Grupo Sombra.
Zetas de la vieja escuela
La guerra violenta iniciada en 2010 entre “Los Zetas” y el “Cártel del Golfo” llevó a detenciones y asesinatos de varios líderes de ambos grupos, presión que provocó la fragmentación de las dos agrupaciones. De esa segmentación han surgido divisiones de Los Zetas, incluido el Cártel del Noreste, el Cártel de La Nueva Sangre Zeta y los Zetas de la Vieja Escuela. Estos últimos fueron supuestamente formados por José Guízar Valencia, alias “Z-43”, y otros disidentes, quienes tomaron el nombre “Old School” porque se mantienen fieles al “negocio original” de los Zetas: el narcotráfico, absteniéndose de otras actividades criminales depredadoras, como secuestro, extorsión y robo de combustible.
La Vieja Escuela se concentra actualmente en el norte de Veracruz con presencia esporádica en otros estados del norte y oriente de México, como Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila, Zacatecas, San Luis Potosí y Quintana Roo; sin embargo, su área principal de operación está en la frontera noreste de Estados Unidos. Ha participado en enfrentamientos violentos contra antiguos aliados, incluidos el Cártel del Noreste, Grupo Sombra y CJNG.
En febrero de 2018 el “Z-43” fue arrestado en la CDMX y, según el diario Milenio, el grupo parece estar actualmente bajo el liderazgo de Antonio Salas Perea, alias “Chihuas”, quien supuestamente ha formado alianzas con grupos disidentes del Cártel del Golfo como “Los Ciclones”.
Los Talibanes
Son un grupo armado de Tamaulipas creado por Iván Velázquez Caballero, alias “El Talibán” o “Z-50”; quien fue operador de Los Zetas, y que se separó en 2012 para desafiar el liderazgo de los hermanos Miguel Ángel y Omar Treviño, conocidos también como “Z-40” y “Z-42”. Ellos operaban principalmente en Zacatecas y San Luis Potosí, donde Velázquez Caballero se había ganado el apodo de “El Talibán” por su hábito de utilizar un machete para decapitar a sus enemigos y a las víctimas de extorsión que no pagaban sus cuotas.
Lo detuvieron en 2012 y al año siguiente fue extraditado a Estados Unidos; sin embargo, su organización ha continuado involucrada en el microtráfico, la extorsión, la trata de personas y el secuestro, supuestamente bajo el mando de su hijo, Raúl, alias “El Talibancito”. En marzo de 2021, InSight Crime informó que los talibanes eran responsables del aumento de la violencia en Zacatecas, en busca del control de este estratégico territorio. Por el momento, los Talibanes han estado aliados al Cártel de Sinaloa en Zacatecas, luchando contra el CJNG por el control de las rutas de la droga.
Según informes, los talibanes estuvieron detrás del fallido intento de asesinato contra el congresista de San Luis Potosí Pedro Carrizales Becerra, “El Mijis”. Frente a oficinas municipales en Zacatecas han dejado varios cuerpos decapitados y amenazas a varios alcaldes y policías del estado, según publicó Óscar Balderas, periodista y experto en materia de crimen organizado en México.
Los Viagras
Ellos son fragmentación de los dos grupos criminales más grandes de Michoacán, “La Familia Michoacana” y los “Caballeros Templarios”; son parte actualmente de Cárteles Unidos, una importante alianza criminal de la región de Tierra Caliente, que busca frenar la incursión del CJNG en aquellas zonas. Desde sus inicios, “Los Viagras” han operado como célula independiente y, ahora son una de las facciones criminales más dominantes en las tierras altas de Michoacán. Fue fundado en Huetamo, Michoacán, por siete hermanos de la familia Sierra Santana; pero varios de ellos han sido asesinados o arrestados. El actual líder de la organización es Nicolás Sierra Santana, alias “El Gordo”, según informes periodísticos.
Un comunicado de prensa emitido en 2014 por el exlíder de la organización, Servando Gómez, alias “La Tuta”, durante la última década, “los Viagras” actuaron como brazo armado de los Caballeros Templarios para combatir a Guerreros Unidos. Hoy, las actividades de los Viagra son principalmente el tráfico de metanfetamina y la extorsión, siendo su rival más importante el CJNG con quienes han librado una intensa guerra.
Han establecido barricadas para defender a balazos su territorio, e impedir la entrada de grupos rivales y autoridades, dejando cautivos a los lugareños. Hacen alarde de prepotencia desfilando por las calles de Tierra Caliente disparando balazos con armas de alto calibre y conduciendo vehículos blindados. En marzo, supuestos miembros de esa organización dispararon contra un helicóptero del Ejército tras la detención del hijo de El Gordo. A consecuencia de la aglomeración de Cárteles Unidos, los Viagras han unido fuerzas con ex grupos de autodefensa como el Cártel del Abuelo y otros grupos escindidos de la Familia Michoacana.
La ventaja de los Viagra –en Tierra Caliente– es el fuerte arraigo que tienen con la población local, comenzando por la familia Sierra Santana, ya que regularmente han repartido obsequios y artículos de primera necesidad en las aldeas, afirmando que “protegen a la población” del CJNG; sin embargo, han surgido grupos de autodefensa civiles en la zona para oponerse a los Viagra.
Los Rojos
La fragmentación de la Organización Beltrán Leyva, OBL, dio origen a los Rojos, una célula importante en la parte central y sureste de México, especialmente en el estado de Guerrero. Aunque varios de sus líderes fueron arrestados entre 2019 y 2020, la organización ha continuado sobreviviendo y recientemente fue incluida por la DEA, Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos, como un grupo activo de tráfico de heroína con vínculos en aquel país.
Jesús Nava Romero, alias “El Rojo”, presunto fundador, es un teniente de la Organización de los Beltrán Leyva que operaba las rutas del narcotráfico desde Guerrero a Morelos. En 2009 las autoridades asesinaron a El Rojo, y su sobrino Zenén Nava, y Santiago Mazari heredaron el liderazgo de la organización. Ambos fueron arrestados entre julio y agosto de 2019 y, en su ausencia, no está claro quién asumió el liderazgo. Tienen influencia en Morelos, Puebla, Estado de México y tierras altas de Guerrero, donde producen goma de opio para heroína. Han sido acusados de extorsión, homicidios, secuestros, trata de personas y desapariciones forzadas.
Rivalizan principalmente con los disidentes del Grupo de los Beltrán, en particular Guerreros Unidos. Ambos grupos están relacionados con las desapariciones de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, y son responsables de los altos niveles de violencia en Guerrero y Morelos. Un reciente informe de la DEA ha indicado que Guerreros Unidos está aliado con el CJNG, y envuelto en una disputa a largo plazo con un grupo local, “Los Ardillos”, que ha controlado el tráfico de drogas a través de partes de Guerrero durante 20 años[1].
NOTA; Elaborado a partir de la investigación de Victoria Dittmar, Paige Bowman y Santiago Previde, reimpreso por InSight Crime.
[1] https://mexiconewsdaily.com/news/the-next-generation-of-criminal-groups-driving-violence-in- mexico/?utm_source=The+Whole+Enchilada&utm_campaign=ee9ca8f645-RSS_EMAIL_CAMPAIGN+The+Whole+Enchilada&utm_medium=email&utm_term=0_f17425060f-ee9ca8f645-350203218 Consultado el 14.08.2021