Por Carlos Pozos (Lord Molécula)
Viernes, nueve de agosto 2024
Claudia Sheinbaum Pardo, virtual presidenta electa de México, ha delineado uno de los primeros grandes retos de su administración: completar los proyectos del Tren Maya y el Tren Interoceánico. Ambos se vislumbran como claves para el desarrollo del sureste del país, con una inversión proyectada de 83 mil millones de pesos.
Durante un encuentro en su casa de transición, Sheinbaum precisó que se requerirán aproximadamente 35 mil millones de pesos para transformar el Tren Maya en un medio de transporte de carga, además de continuar su operación como tren turístico. Este nuevo enfoque buscará aprovechar las mismas vías ya existentes, con obras adicionales que serán gestionadas por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). La finalidad es que el tren pueda estar listo para cumplir esta doble función en un plazo máximo de dos años.
El Tren Interoceánico, por su parte, se expandirá hasta Guatemala y conectará con la refinería de Dos Bocas en Tabasco, gracias a la conclusión de las Líneas K y FA. Este proyecto requiere una inversión adicional de 48 mil millones de pesos. La prioridad es garantizar que esta infraestructura no solo facilite el transporte de personas, sino que también impulse el comercio internacional y la integración regional, especialmente en la zona sur-sureste de México.
En una conferencia de prensa posterior a una reunión con gobernadores del sur y sureste del país, Sheinbaum enfatizó que “no porque vayamos a desarrollar los trenes hacia el centro-norte, vamos a dejar el sureste abandonado”. Reafirmó su compromiso con la región, señalando que la inversión en infraestructura ferroviaria será clave para el desarrollo económico y social de estas entidades.
Además de estos megaproyectos, Sheinbaum detalló que se están planeando obras de movilidad de gran importancia para cada una de las entidades en la región. Estas iniciativas buscan asegurar que la infraestructura creada no solo beneficie a los grandes polos industriales y comerciales, sino también a las comunidades locales.
Finalmente, en una reunión con altos ejecutivos de Goldman Sachs, encabezados por John Waldron, presidente del grupo de banca de inversión, Sheinbaum discutió las posibilidades de colaboración y financiamiento para estos ambiciosos proyectos. La visita de representantes de una de las entidades financieras más influyentes del mundo subraya la relevancia económica y estratégica de las inversiones planeadas para los próximos años en México.