- La conferencia de este jueves tuvo una duración de 3 horas y 29 minutos
Redacción
Ciudad de México, jueves 21 de julio de 2022.- El Presidente Constitucional de la Nación, Andrés Manuel López Obrador rompió esta mañana el récord de la conferencia mañanera más larga en lo que va de su gestión al frente del Ejecutivo Federal, debido a que la conferencia mañanera de este jueves 21 de julio de 2022, tuvo una duración total de 3 horas 29 minutos, lo que la convirtió en la más larga desde el inicio de este ejercicio de diálogo circular con la prensa que cubre las aactividades presidenciales.
El récord vigente hasta antes de la mañanera de este jueves le pertenecía a la conferencia del 16 de diciembre de 2021 que tuvo una duración de 3 horas y 22 minutos.
Sin embargo, entre las mañaneras que destacaron por su larga duración se encuentra la del 11 de noviembre de 2020 cuando el titular del Ejecutivo Federal rompió su récord de duración de las mañaneras con una conferencia de 3 horas con 12 minutos.
Tan sólo 13 días después, el 24 de noviembre del 2020 —la conferencia mañanera número 500—, AMLO parece que decidió celebrarla a lo grande con una duración de 3 horas y 20 minutos.
En lo que refiere al 2022, el pasado 4 de febrero concretó la mañanera más larga de lo que iba del año con una duración de 3 horas y 8 minutos, misma que ya fue superada por la de hoy jueves 21 de julio.
En contraste, la conferencia más corta de AMLO fue el pasado 11 de marzo de 2019, con una diminuta duración de 20 minutos, pues después debía dar un mensaje por sus primeros 100 días de gobierno en el Patio Central de Palacio Nacional.
La mañanera de este 21 de julio inició como cada jueves con el Subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía Berdeja, que presentó su informe semanal “Cero Impunidad”, donde destacó las principales acciones en materia de seguridad del Gobierno Federal en conjunto con los estados.
Terminada la intervención de Mejía Berdeja y durante la sección de preguntas y respuestas, el Presidente López Obrador aseguró que no está en negociación el dominio de la nación sobre el petróleo, a diferencia de lo hecho en gobiernos pasados, ante la inconformidad presentada por los Gobiernos de Estados Unidos y Canadá por la política energética de México.
